El de hoy, es un plato muy sano pero no por ello nada sabroso. Son ideales para una cena ligera… Continúe leyendo »
El de hoy, es un plato muy sano pero no por ello nada sabroso. Son ideales para una cena ligera y saludable o incluso las podemos tomar de entrante en una comida o de picoteo. También van muy bien de guarnición.
Las espinacas son ricas en fibra, vitaminas, proteínas y minerales. Junto con las pasas y piñones tendremos un plato lleno de contrastes y sabores donde juntaremos dulce, salado, crujiente… y una frescura visual que nos da ese verde!
Ya sabéis, en tan sólo 20 minutos podéis tener un plato delicioso. Os animáis?
Ingredientes
- 300 gr. de espinacas frescas
- 50 gr. de piñones
- 50 gr. de pasas
- 1 diente de ajo
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
Abreviaturas
- c/s: Cuchara sopera
- c/p: Cuchara de postre
- c/c: Cuchara de café
- c/n: Cantidad necesaria
Elaboración
- Picamos bien el diente de ajo. Reservamos.
- Ponemos al fuego una sartén grande con una cucharada de aceite, y cuando coja calor echamos las espinacas (si queremos podemos picarlas un poco, aunque yo las suelo echar enteras). Al principio parecerá que no caben todas, pero poco a poco irán menguando. Rehogamos hasta que las espinacas pierdan todo el agua. Más o menos nos llevará unos 15 minutos.
- Una vez listas las espinacas, las reservamos en un plato.
- En la misma sartén donde hemos preparado las espinacas, y sin aceite, tostamos los piñones con mucho cuidado de que no se nos quemen ya que en ese caso amargarían.
- Cuando los piñones comiencen a tomar color, añadimos las pasas y el diente de ajo picado. Salteamos durante un minuto y reincorporamos las espinacas que teníamos reservadas.
- Mezclamos bien todos los ingredientes con ayuda de una cuchara de madera o simplemente meneando la sartén con golpes de muñeca . Lo dejamos en el fuego (seguimos moviendo de vez en cuando) durante un par de minutos más para que todos los ingredientes queden bien integrados y calentitos.
- Retiramos del fuego y servimos rápidamente para que no se enfríe.
Trucos y comentarios
- En lugar de usar espinacas frescas, también podéis usar congeladas, pero OJO, antes de cocinarlas es necesario descongelarlas y escurrirlas bien apretándolas con las manos para sacarles gran parte de su agua y así evitar que al ponerlas en las sartén se nos hiervan en lugar de rehogarse. Al rehogarlas, tendremos un plato más sabroso
- Aunque ya no serían 'espinacas a la catalana' en su máxima expresión, también podéis cambiar los piñones por otro fruto seco de vuestra elección como nueces, almendras o anacardos. Si os decantáis por estos, podéis picarlos un poquito para no dejarlos tan grandes.
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