Hace unos días (en mi última receta) os presentaba un gazpacho andaluz, típica receta veraniega. El caso es que entre… Continúe leyendo »
Hace unos días (en mi última receta) os presentaba un gazpacho andaluz, típica receta veraniega. El caso es que entre gazpacho y salmorejo, y salmorejo y gazpacho, tenemos muy cubierto nuestro entrante o primer plato… claro, que a algunos les puede parecer un poco cansino comer casi todos los días lo mismo, pero es que ahora es lo que apetece! Para hacerlo más llevadero aquí os dejo una variante del gazpacho, y digo una variante porque con la misma filosofía podemos hacer ‘decenas’ de ellos. Son los ‘gazpachos frutales’, sí, sí, aquellos a los que echamos fruta a cambio de quitar parte de los tomates. El de hoy es un gazpacho de sandía… todavía más refrescante, si cabe, que el andaluz.
Para aquellos que os guste esta idea (darle el toque fruta), os recomiendo también el salmorejo de mango que os dejé el año pasado y que en la familia ha sido toda una revolución
Ingredientes
- 600 gr. de sandía
- 500 gr. de tomate maduro (yo uso los de pera)
- 50 gr. de pimiento verde
- 100 gr. de pepino
- 60 gr. de cebolla
- 80 gr. de pan del día anterior
- 1 diente de ajo
- 1 c/p de sal
- 20 ml. de vinagre de Jerez
- 70 ml. de aceite de oliva virgen extra
Abreviaturas
- c/s: Cuchara sopera
- c/p: Cuchara de postre
- c/c: Cuchara de café
- c/n: Cantidad necesaria
Elaboración
- Lavamos bien los tomates, les quitamos la parte dura donde se une el pedúnculo, los cortamos en dos o tres trozos y los echamos al vaso de nuestro robot de cocina.
- Cortamos la sandía en trozos asegurándonos quitar bien las pepitas. Añadimos al vaso de nuestro robot de cocina.
- Trituramos los tomates y sandía hasta conseguir una salsa líquida.
- Incorporamos el pan en trozos y dejamos que se empape un poco. Mientras, vamos preparando el resto de verduras.
- Lavamos bien el trozo de pimiento pimiento verde y le quitamos las semillas que pudiera tener en su interior. Reservamos.
- Pelamos el trozo de pepino (la piel es lo que hace que repita el pepino por la existencia de unas sustancias amargas) y lo troceamos. Reservamos.
- Le damos dos o tres cortes al trozo de cebolla y reservamos.
- Pelamos el diente de ajo y reservamos.
- Volvemos a triturar con nuestro robot de cocina (esta vez ya con el pan un poco húmedo) durante unos minutos hasta conseguir que los trozos de pan 'desaparezcan' con el tomate.
- Añadimos todas las verduras (pimiento, pepino y cebolla) junto con el diente de ajo, la sal y el vinagre de Jerez. Volvemos a triturar hasta conseguir una salsa totalmente líquida. Si vemos que está demasiado espesa, podemos añadir un poco de agua para aligerarla.
En Thermomix, trituraremos unos 3 minutos a velocidad progresiva 5, 7 y 10.
Aquellos que no utilicéis un robot de cocina muy potente o que utilicéis la batidora de mano, podéis pasarlo por un colador o chino para retirar posibles trozos de piel y pequeñas pepitas que hayan quedado hasta que nos quede lo más fino posible. - Añadimos el aceite de oliva virgen extra y mezclamos con nuestro robot de cocina o batidora pero a una velocidad baja, lo justo para que se mezcle bien con el resto de ingredientes ya que si le damos mucha potencia podemos llegar a emulsionarlo y no es la textura que buscamos.
En Thermomix, unos 40 segundos a velocidad tres y medio. - Probamos el punto de sal y rectificamos si es necesario.
- Metemos en la nevera para que enfríe al menos dos o tres horas. Si tenéis prisa, podéis (sólo en caso de suma necesidad) incorporarle unos cubitos de hielo aunque quedará más 'aguado' (la sandía ya tiene bastante agua).
- Servimos bien fresquito y podemos acompañar con unas bolas de sandía que haremos con una cuchara parisina. Esto es sólo una parte del acompañamiento y no parte de los 600 gr. de sandía que trituramos (esto es un añadido 'sólido'). También podemos echarle un chorrito de aceite (siempre de oliva virgen extra) por encima.
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