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La verdad es que entre las muchas recetas que tengo pendientes de hacer o de subir a este blog, había una que siempre tenía ganas de llevar a cabo: un pan. ¿Quién no ha querido alguna vez comer su propio pan?. Pues así estaba yo, hasta que me decidí a ponerme manos ‘a la masa’.
El tema de los panes es todo un mundo… y todo un arte, así que como todo en esta vida es mejor empezar por lo más sencillo para así ir evolucionando poco a poco. Dicho y hecho, en esta receta no necesitamos masa madre y por tanto lo podemos llevar a cabo en el momento que decidamos sin preparativos previos (salvo la de los ingredientes como es lógico).
Los que me conocéis (o me vas conociendo a través de este blog) sabéis que no suelo utilizar mucho mi robot de cocina (en mi caso Thermomix) pero he de reconocer que para las masas (y para otras cosas) son una maravilla. Aún así, para aquellos que no tenéis a este ‘compañero de fatigas’ os dejo también la receta tradicional.
Ingredientes
- 320 gr. de harina todo uso
- 180 ml. de agua mineral
- 20 gr. de aceite de oliva virgen extra
- 20 gr. de levadura fresca
- 1 c/c de sal
Abreviaturas
- c/s: Cuchara sopera
- c/p: Cuchara de postre
- c/c: Cuchara de café
- c/n: Cantidad necesaria
Elaboración
Preparación con Thermomix
- En el vaso de la Thermomix echamos el agua, el aceite y la levadura. Programamos 2 minutos a velocidad 2 y 37º.
- Tamizamos la harina y la sal y la incorporamos en el vaso. Damos tres toques al botón de turbo.
- A continuación programamos tres minutos a velocidad espiga.
- Una vez pasado el tiempo nos cercioramos que la masa no se quede pegada a las paredes del vaso. En caso contrario, añadimos un poco más de harina y programamos otros 30 segundos a velocidad espiga.
La masa nos ha de quedar brillante, esponjosa y nada pegajosa. - Sacamos la masa del vaso (mejor con las manos enharinadas) y le damos forma de 'hogaza'. Dependiendo de si la hacemos más 'alto' o más ''chata', tendremos un pan con más o menos miga.
- Colocamos la masa sobre un papel de hornear en la bandeja del horno. Le untamos un poco de aceite de oliva virgen extra y espolvoreamos un poco de harina por encima.
- Le damos unos cortes (en plan estrella '*') con la punta de un cuchillo y metemos la bandeja en el horno SIN precalentar durante 45 minutos a una temperatura de 220º o hasta que al golpearlo suene a hueco.
- Una vez cocido, sacamos el pan y lo dejamos enfriar sobre un rejilla.
Preparación tradicional (amasado manual)
- En un bol echamos el agua (en este caso debe estar tibia), el aceite y la levadura y removemos bien hasta que se disuelva la levadura.
- Tamizamos la harina y la sal y la mezclamos con el resto de ingredientes para empezar a trabajar la masa.
- Colocamos la masa sobre una superficie enharinada y amasamos con las manos durante aproximadamente 10 minutos hasta conseguir una masa homogénea, lisa y no muy pegajosa. Es posible que para poder ir trabajando la masa, debamos enharinarnos un poco las manos de vez en cuando.
Para amasar, utilizaremos las dos manos, plegando la masa hacia nosotros y aplastándola un poco con la parte de mano más pegada a la muñeca (es que no sé como se llama esta parte ). - Una vez tengamos nuestra masa, le daremos forma de hogaza.
- La colocamos sobre un papel de hornear en la bandeja del horno. Le untamos un poco de aceite de oliva virgen extra y espolvoreamos un poco de harina por encima.
- Le damos unos cortes (en plan estrella '*') con la punta de un cuchillo y metemos la bandeja en el horno SIN precalentar durante 45 minutos a una temperatura de 220º o hasta que al golpearlo suene a hueco.
- Una vez cocido, sacamos el pan y lo dejamos enfriar sobre un rejilla.
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