Justo antes de Navidad, estuve en un curso de Thermomix donde nos dieron ideas para las comidas y cenas de… Continúe leyendo »
Justo antes de Navidad, estuve en un curso de Thermomix donde nos dieron ideas para las comidas y cenas de Navidad. La verdad es que estos cursos están bien para conocer cosas de la máquina y verla como una herramienta de cocina y no un utensilio para seguir una receta. No os voy a engañar diciendo que soy un amante de este robot de cocina, pero en ciertas ocasiones sí que lo veo muy cómodo (aunque sería mucho más si tuviese en casa el mismo número de vasos que tienen en los cursos). El caso es que en esta ocasión, lo que me traje es una idea: unas peras forradas de hojaldre. En aquél curso las presentaron sobre una cama de lechugas varias y con una vinagreta (que era lo único que hicieron de esa receta con la Thermomix).
El caso es que sólo con el concepto, he convertido esa ‘ensalada’ en un postre. ¡Y qué postre! La verdad es que lo tiene todo: presentación, sabor y otra cosa muy importante: sin una cantidad exagerada de calorías que meterse para el cuerpo. La pera, el hojaldre,… y esa salsa de chocolate que baña el plato y que nada más verla se nos hace la boca agua.
En esta receta, lo más importante es la pera (en este caso de conferencia). Es conveniente que sea una pera no muy pequeñita y que estén un poco enteras. Ya sabemos que este tipo de peras, debido a la cantidad de agua que tienen, pueden estar ‘blandurrias’ a la hora de comprarlas. Con esas hipótesis de partida (y aunque compré otras a la hora de hacer la compra de la semana) me fui a ALDI donde suelen tener fruta de este tipo: grande y no excesivamente madura. Además, puedes elegir las que tú quieras. Dicho y hecho. Todo un acierto de compra
Y poco más, que espero que disfrutéis de este postre que seguro sorprenderá a vuestros invitados… claro si no os pasa como a mí, que me vieron todo el proceso de elaboración. Es mucho más impactante llevarlas de ‘sorpresa’ a la mesa
Ingredientes
- 4 peras de conferencia
- 1 vaina de vainilla
- 4 c/s de azúcar
- 1 lámina de hojaldre (seguramente os sobrará)
- 1 huevo
- Para la salsa de chocolate
- 125 gr. de chocolate negro
- 25 gr. de mantequilla
- 150 ml. de nata líquida
Abreviaturas
- c/s: Cuchara sopera
- c/p: Cuchara de postre
- c/c: Cuchara de café
- c/n: Cantidad necesaria
Elaboración
- Pelamos las peras y les cortamos un poco la base para que se puedan quedar de pie al presentarlas. Es importante no quitarles el rabo, ya que nos servirán para sujetar el hojaldre cuando las vayamos a forrar.
- En una cazuela grande colocamos las peras junto con la vaina de vainilla y las 4 cucharadas de azúcar. Las cubrimos de agua y ponemos a hervir a fuego medio hasta que estén tiernas. Para comprobar este punto bastará con pinchar con un palillo y ver que la pera no ofrece mucha resistencia. Tendremos cuidado de no cocerlas demasiado para que no se nos deshagan. A mí me llevó unos 30 minutos pero dependerá mucho del tamaño de las peras y de lo 'enteras' (menos maduras) que estén.
- Una vez tenemos las peras ya hechas las sacamos y las dejamos escurrir sobre un plato con papel absorbente.
- Ponemos a precalentar el horno a 200º con calor arriba y abajo.
- Mientras escurren las peras, preparamos el hojaldre. Dependiendo del tamaño de nuestras peras necesitaremos un poco más o un poco menos de hojaldre, pero con una lámina seguro que nos sobra algo de masa. Para ello cortamos la masa en tiras de unos 2 cm. de ancho.
- Cogemos una primera tira, le hacemos un agujero en uno de los extremos y lo metemos por el rabo de la pera (esto nos permitirá sujetar la tira con la pera) y comenzamos a 'forrarla'. Dependiendo de lo corta/larga que sea la tira o lo grande que sea la pera, puede ocurrir que con una única tira no terminemos de forrar la pera. En ese caso, cogeremos otra tira para continuar por donde nos habíamos quedado con la primera. Un truco para que luego no se despeguen las uniones de las tiras es darles un poco de agua (como si fuese pegamento) para 'sellar'.
Debemos tener en cuenta que la base de la pera, debe quedarse sin forrar. - Repetimos la operación anterior con el resto de peras.
- Colocamos nuestras peras ya forradas sobre una fuente apta para horno y las pintamos con huevo batido con la ayuda de un pincel.
- Metemos las peras en el horno (previamente precalentado) y dejamos que se horneen a 200º hasta que se dore el hojaldre. El tiempo dependerá un poco del horno y las indicaciones del fabricante. En mi caso, tardaron entre 30 y 35 minutos.
- Mientras se hornean las peras, preparamos la salsa de chocolate. Para ello, echamos en un cazo el chocolate en trozos, la mantequilla y la nata líquida y lo vamos derritiendo a fuego lento removiendo continuamente con una cuchara de madera. Si queremos que esté un poco más dulce podemos echar un poquito de azúcar (yo no lo consideré necesario).
- Para emplatar, basta con poner un poco de salsa de chocolate en un plato y colocar una pera encima de ésta. Así de sencillo. Eso sí, es conveniente llevar el chocolate que nos sobre en una salsera a la mesa ya que más de uno querrá echarse un 'poquito' más. ¡Qué aproveche!
Sugerencias
- Si vuestras peras están más blanditas, podéis saltaros el paso de cocerlas. De este modo también ahorraríais algo de tiempo.
- Si queremos darle un toque algo más dulzón al hojaldre, antes de cortarlo en tiras, podemos echar un poquito de azúcar y pasar el rodillo (sin presionar mucho) lo justo para que el azúcar se integre en el hojaldre.
- Aunque en mi caso sólo he pelado la pera, también podemos ir un poco más allá y con la ayuda de un descorazonador, quitarle las pepitas, rellenarla con frutos secos o chocolate, y luego cerrar de nuevo el agujero con la parte de pera que retiramos al quitarles las semillas (quitamos una especie de cilindro).
- Las peras las podemos servir frías o calientes/templadas, pero si le ponemos la salsa de chocolate ésta está mucho mejor caliente.
- Además de la salsa de chocolate, podemos incluso acompañar con una bola de helado o un poco de nata montada. Así el 'pecado' es completo
DELICIOSAS!! Y creo que es importante decir que, aunque puede parecer un postre pesado por el hojaldre, para nada!! Como la pera queda tan suave y jugosa el conjunto entra sin problemas… vamos, que cae enterita aunque la comida haya sido como si no hubiera mañana!!! ;oP
Eso es cierto Esther, aunque no es menos cierto que a los que somos de postre no se nos pone nada por medio