Las empanadas y quiches son una buena opción para una cena de verano (y de invierno). Este quiche de puerros y langostinos es una auténtica delicia.
Ahora que hace calor da gusto salir a la terraza a cenar. Ese aire fresco que corre (cuando correo) invita a disfrutar de una cena relajada en familia. Y qué mejor forma que hacerlo compartiendo un quiche que siempre gusta a ‘casi’ todo el mundo Me refiero a la quiche de puerros y langostinos donde los puerros nos darán una jugosidad extra y un sabor exquisito. Veréis que es una apuesta segura.
Este quiché lo he hecho varias veces como parte del picoteo de alguna comida o cena de Navidad, y la verdad es que ha sido todo un éxito. Hasta los más ‘reacios’ a comer este tipo de preparaciones y mucho más dados a la cocina tradicional y los asados, le han dado el visto bueno. Es por eso por lo que me atrevo a decir que habrá poca gente que no le guste este quiché (quizás a los que no les guste el marisco).
Como la mayoría de estas elaboraciones podéis hacer vosotros mismos la masa o bien comprarla ya hecha y ahorrar tiempo. Esta vez yo me he decantado por la comprada, aunque en alguna otra ocasión también la he hecho a mano aunque no la tengo en el recetario. Me lo voy a apuntar como tarea para así tener una masa simple que nos puede sacar de cualquier improvisto para este tipo de elaboraciones
Y si queréis más recetas de quiche, podéis echar un vistazo a otras que tengo en el recetario como el quiche de pimientos tricolor o el quiche de calabaza, calabacín y puerro.
Ingredientes
- 1 masa quebrada
- 3 puerros grandes
- 500 g de langostinos (sin cocer)
- 4 huevos
- 200 ml de nata para cocinar
- Aceite de oliva virgen extra
- Nuez moscada
- Sal y pimienta recién molida
- Medidas para un molde de 26 cm de diámetro
Abreviaturas
- c/s: Cuchara sopera
- c/p: Cuchara de postre
- c/c: Cuchara de café
- c/n: Cantidad necesaria
Elaboración
- Empezamos precalentando el horno a 200º con calor arriba y abajo.
- Estiramos un poco nuestra masa quebrada, y forramos un molde apto para el horno que previamente habremos engrasado con un poco de mantequilla. Pinchamos la masa con un tenedor para evitar que suba al hornearla.
- Colocamos un papel de hornear sobre nuestra masa y ponemos algo de peso (como por ejemplo unos garbanzos). Horneamos la masa durante 10 minutos a 200º.
- Transcurridos los 10 minutos, quitamos el papel de hornear (junto con el peso que hayamos puesto) y dejamos otros 8-10 minutos en el horno para que esta vez coja algo de color. Sacamos del horno y reservamos.
- En una sartén con dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra, pochamos los puerros que habremos cortado en media lunas.
- Mientras se pochan los puerros, pelamos los langostinos, reservamos 4 o 5 enteros para decorar y el resto los cortamos en trocitos no muy grandes (serán parte del relleno).
- En un bol, batimos los huevos, añadimos la nata e incorporamos los puerros pochados y los trozos de langostinos. Salpimentamos y añadimos la nuez moscada. Mezclamos.
- Ponemos el relleno que acabamos de preparar sobre la masa, colocamos los langostinos que habíamos reservado para decorar y horneamos a 180º (OJO que hemos bajado la temperatura) durante 30 minutos con calor arriba y abajo.
Para tener en cuenta
- Si preferís, podéis no cocer la masa previamente un poco y directamente colocar el relleno sobre la masa estirada en el molde y pinchada con un tenedor. En este caso la masa quedará más tierna y para mi gusto un pelín húmeda/cruda. Podemos darle algo más tiempo de horno, pero ojo no os paséis y vayáis a dejar el relleno seco. Otra opción es hornearlo a 200º pero teniendo cuidado de que no se nos quemen los bordes de la masa. Si véis que se tuestan mucho y todavía no está hecho el quiché, podéis cubrirlo con un papel de aluminio hasta que el relleno esté cuajado.
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